A partir de determinadas edades en las mujeres, es frecuente observar que la densidad de sus huesos va disminuyendo, en muchas ocasiones denotando una bajada de peso a nivel corporal y llegado a situaciones más extremas, lesiones en la columna y las caderas.
Para comprobar si ha habido dicha disminución ósea se necesita realizar una prueba llamada: densitometría ósea.